Hace años Sebastián y yo tenemos la inquietud de viajar y de vivir fuera, por una oportunidad para todos. Por nosotros, por un nuevo horizonte de trabajo, por una mejor calidad de vida, por la oportunidad de aprender un nuevo idioma, por conocer otras culturas, etc. Por saber que podemos...
Hace algunos meses a Sebastián lo invitaron a trabajar a la Universidad de California, San Diego. Y han pasado muchas cosas desde entonces. Desde dudar de que todo lo que se nos venia era cierto, hasta los interminables tramites de visa.
Y bueno, hace casi un mes Sebastian se fue a buscar nuestro lugar en el mundo, ya elegimos departamento, ya buscamos algunos muebles usados, y mientras yo me dedico a terminar de desarmar la casa en Santiago, el arma nuestro departamento en San Diego. Si, muy loco, quizas, pero estamos contentos y decididos a seguir en esta aventura juntos, como siempre.Lo he extrañado mucho, pero el tiempo ha pasado volando pues hay muchas cosas que hacer. Botar cachureos, regalar ropa, vender lo que queda, desocupar la casa, cuidar a los niños, prepararlos, etc, etc.
Y estoy ya casi en las despedidas. Me quedan como 10 dias para partir, y me siento emocionada, se que se vienen cosas muy fuertes en mi vida y en la de los niños. Pero lo que mas quiero ahora, es estar con mi amorcito.
Se que extrañare mi casa, mis papás, a mi hermano, mi cuñada y sus hijos, mis abuelos, mis tios y tias, primos y primas, amigos y amigas...y sobre todo extrañaré a mi hermanita querida, que, para mi, es lo mas dificil de dejar de Chile.
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